martes, 3 de agosto de 2010

Después de Ribadeo


Despierta dejó de ser una idea, una historia, un conjunto de acuarelas, unos actores, y un equipo, el sábado pasado, en la bonita localidad de Ribadeo, donde presentamos el trabajo que habíamos grabado y editado en dos jornadas maratonianas, donde el cansancio por la falta de sueño nos afectó como una droga a todos los que hasta allí nos desplazamos para vivir unos días inolvidables, que me recuerdan mucho a cuando éramos sólo unos críos, y nos íbamos de campamento unos días, que luego paracían meses, en el recuerdo. Y digo que dejó de ser una cosa, porque dejó de serlo, para ser otra, otra distinta, evolucionada, compartida. Una cosa que ya no es sólo mía, sino de un grupo de personas, y ésta es una de las razones por las que me gusta trabajar en un equipo, a poder ser pequeño y abarcable, donde cada uno aporta lo que puede, y todos nos sentimos en cierto grado responsables del proyecto.

Es ahora, una vez superado el festival, cuando empieza el verdadero trabajo de postproducción de Despierta, como cortometraje de ficción que esperemos tenga una, quizás no larga, pero sí intensa vida, en el ámbito de los festivales que nos vienen por delante.

A todo el equipo de Despierta, a Rita Gutiérrez y Darío Fernández, a Cristina Ramírez, que realizó un estupendo storyboard, a Isabel Cobo, que compuso e interpretó la música de esta pequeña película, a Manuel Vidal, que me apoyó desde el principio, y por supuesto a Brais Gen, con el que tengo una comunicación que sólo tengo con unas pocas personas, gracias.

Habéis hecho un gran trabajo.

Texto: Pablo Portero
Fotografía Post: Rita Gutiérrez